Mareos en espacios abiertos: ¿Signo de agorafobia?
David Brossa
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Te pasa: vas por una plaza amplia, el supermercado o simplemente sales a la calle y, de repente, todo empieza a dar vueltas. Tu corazón se acelera, sientes que te falta el aire y aparece ese miedo tan conocido: «me voy a desmayar». Si esto te suena, quiero que sepas algo importante: no estás solo/a. Muchos de mis pacientes llegan con esa misma sensación. Y sí, muchas veces, estos mareos están relacionados con la agorafobia.
Por qué da ansiedad estar en espacios abiertos
La ansiedad no aparece porque sí. Tiene un mensaje, una razón. En el caso de los espacios abiertos, el miedo suele estar relacionado con la sensación de vulnerabilidad: «si me pasa algo aquí, no podré escapar» o «nadie podrá ayudarme». Es como estar en medio de una película donde todos te miran, pero no hay salida.
Cuando el cerebro percibe ese «peligro», aunque sea irracional, activa el sistema de alarma. Y ahí es cuando aparecen los síntomas: mareos, vista nublada, palpitaciones… Como si tu cuerpo dijera: «corre, huye de aquí».
Cómo la ansiedad se convierte en mareos cuando estás en espacios abiertos
Imagínate que estás en una montaña rusa. Tu cuerpo se tensa, tu respiración se vuelve rápida y superficial, y el corazón late con fuerza. Eso mismo pasa en una crisis de ansiedad. La hiperventilación reduce el oxígeno al cerebro y provoca mareo. No es que te vayas a caer, es que tu cuerpo está reaccionando con una alerta falsa.
La buena noticia es que, aunque los síntomas son intensos, no son peligrosos. Y se pueden trabajar.
Otros síntomas de miedo en espacios abiertos
- Palpitaciones o taquicardias: el corazón se acelera porque el cuerpo cree que tiene que huir.
- Sensación de desmayo: muy frecuente, aunque rara vez sucede de verdad.
- Presión en el pecho o dificultad para respirar: puede parecer un ataque al corazón, pero es ansiedad.
- Sudoración, temblores, hormigueo: respuestas automáticas del cuerpo ante el miedo.
Muchos acaban en urgencias convencidos de que algo físico grave ocurre. Pero el diagnóstico suele ser el mismo: ansiedad.
¿Se puede tratar la agorafobia? Sí, y te explico cómo
La agorafobia tiene tratamiento y la mejora es real. No es de un día para otro, pero con el acompañamiento adecuado se puede recuperar la tranquilidad. El proceso incluye:
- Psicoterapia cognitivo-conductual: para entender los pensamientos que mantienen el miedo.
- Exposición progresiva: enfrentarte poco a poco a esos espacios que hoy evitas.
- Técnicas de regulación: respiración, relajación, mindfulness…
- Acompañamiento profesional: alguien que esté a tu lado en cada paso.
Yo mismo he acompañado a personas que no podían salir de casa y hoy vuelven a pasear por su ciudad. Tú también puedes.
Tu primer paso para acabar con la agorafobia
Si sientes que la ansiedad te está robando libertad, quiero que sepas esto: no eres raro, no estás roto, no estás solo. Lo que te pasa tiene nombre, tiene explicación y, sobre todo, tiene solución.
Pide ayuda, da el primer paso. Yo soy psicólogo experto en agorafobia y creo que te puedo ayudar mucho. Si te cuesta dar este primer paso sólo tienes que darle al botón de abajo y te saldrá un mensaje predeterminado para inciar una conversación de whatsapp conmigo, ¡ni si quiera tienes que escribir!