Cómo superar la ansiedad y el miedo en autobús
David Brossa
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Subirse a un autobús puede parecer algo sencillo para muchas personas. Pero si sufres de ansiedad o agorafobia, sabes que no siempre es tan fácil. De repente, el simple hecho de sentarte en un asiento rodeado de gente, sin posibilidad de salir cuando quieras, se convierte en una amenaza. Y eso genera una duda obsesiva: ¿Qué me está pasando?
¿Por qué da ansiedad estar en el autocar?
Imagina esto: entras en el autobús, se cierran las puertas, arranca… y tu cuerpo se activa como si estuvieras en peligro. No hay un depredador, no hay una amenaza real, pero tu mente interpreta la situación como peligrosa. Y ahí empieza todo:
- Sensación de encierro
- Miedo a desmayarte y que todos te vean
- Pensamientos como «¿y si me da algo y no puedo salir?»
No estás solo. Esta sensación es muy común en personas con agorafobia o trastornos de ansiedad generalizada.
Síntomas que puede provocar la agorafobia en autobús
Cuando se activa el miedo, el cuerpo responde. Y a veces, lo hace de forma muy intensa. Estos son algunos de los síntomas que puedes sentir:
- Palpitaciones o taquicardias
- Sudoración excesiva
- Mareo o sensación de desmayo
- Presión en el pecho
- Dificultad para respirar
- Sensación de estar «fuera de ti» o de perder el control
Muchas personas incluso piensan: «Me va a dar un ataque al corazón». Pero no, no estás teniendo un infarto. Es ansiedad.
Cómo se trata el miedo al autobús
No hay una fórmula mágica, pero sí hay herramientas que ayudan. Te cuento algunas que trabajo a menudo con mis pacientes:
- Psicoeducación: Entender lo que te pasa es el primer paso. Saber que no estás loco ni en peligro, sino que tu sistema de alarma está hiperactivado.
- Exposición progresiva: No hace falta que te subas al autobús y hagas un viaje de 2 horas el primer día. Empezamos por pequeños pasos: subir, bajar, sentarse un minuto…
- Técnicas de regulación emocional: Respiración consciente, anclajes, relajación muscular progresiva…
- Reestructuración cognitiva: Cuestionar esos pensamientos catastrofistas y aprender a verlos con otra perspectiva.
Qué puedo hacer para calmar los síntomas de ansiedad en el bus
Te dejo algunas ideas que pueden ayudarte en el momento:
- Respira lento y profundo. El objetivo no es hiperventilar, sino oxigenarte con calma.
- Lleva auriculares y escucha música relajante o un podcast que te guste.
- Ten preparado un «kit de seguridad»: una botellita de agua, una pelota antiestrés, una nota escrita con palabras que te tranquilicen.
- Habla contigo mismo con amabilidad: «Esto es ansiedad, no me voy a morir, va a pasar».
- Recuerda tus avances. Has subido. Estás en el bus. Eso ya es un logro.
La clave para superar la ansiedad al bus a largo plazo
Superar el miedo al autobús no se consigue de un día para otro. Pero sí se puede. Con paciencia, con apoyo, y con las herramientas adecuadas.
Cada pequeño paso que das es una victoria. Y sí, a veces habrá recaídas, momentos difíciles, dudas. Pero también habrá días en los que subir al autobús será simplemente eso: subir al autobús.
Confía en ti. Estás mucho más cerca de conseguirlo de lo que crees. Si necesitas ayuda para ser consistente a largo plazo, puedes contactarme, soy psicólogo especialista en agorafobia y ansiedad. ¡Mandame un mensaje por whatsapp y cuéntame tu caso!